Chivo expiatorio
El chivo es el macho joven de la cabra, mientras que "expiar" se entiende como la acción de purificarse de las culpas por medio de algún sacrificio.La expresión proviene de un ritual del antiguo pueblo de Israel para el cuál se elegían dos chivos; mediante el azar se elegía uno para entregar a la figura de Yaveh (dios), que era sacrificado por el sacerdote durante el rito; el otro era cargado con todas las culpas del pueblo judío, y entregado a Azazel (el demonio). Este último, conocido como chivo expiatorio era abandonado en mitad del desierto, acompañado de insultos y pedradas.
En la actualidad se utiliza la expresión para denominar a aquél que ha pagado las culpas de la gran mayoría, librando a estos de represalias.